sábado, 27 de junio de 2009

Bajo la lluvia




La angustiosa tarde no paraba de caer sobre sus hombros;
siluetas empapadas de fragmentos del obnubilado encima sus cabezas.
Su rostro yacía hipnotizado bajo el enredado pelo opacado por la lluvia,
llegando al punto de la confusión contra el oscuro matiz de su abrigo.
Él la miraba parado desde el frente, a kilómetros de distancia;
hasta que sus pálidas manos encontraron el cuerpo
que estilaba su penuria.
Ella lagrimeó un sollozo mudo,
que confundiose con el mar de invierno bajo sus pies.
En un cálido abrazo desaparecieron todas las controversias,
las frases inconclusas, los miedos, el frío, la lluvia,
sus manos entumidas y los cuerpos mojados
consumidos por el calor del estrecho;
dejando de esta manera insólita sus irónicas existencias terrenales.


G.S. 27/06/09

viernes, 26 de junio de 2009

Beso




Ocaso de tus labios, contiguo dulzor que proclama un nuevo despertar;
Como cual fénix viviera dentro; carne amante, intenso color rojo sangre que invade cada centímetro de tu boca.
Beso profundo; despojo de almas y de ambiguas palabras… beso calmante, que duerme el celo de los míos, para revivirlos como tuyos en la boca más dulce de todas...
Beso suave, gustoso de ti; fuente de recuerdos gélidos que queman; fuente de sorpresa y somnoliento ocaso.
Ocaso de tus labios, reincidentes de una sola constante…
El despertar de otro beso con ganas de ti.


G.S. 26/06/09